Imagina que estás conduciendo por una transitada intersección y ves un semáforo amarillo intermitente. ¿Qué haces en esa situación? ¿Aceleras para pasar justo antes de que cambie a rojo? ¿O frenas con seguridad para detenerte y esperar la próxima luz verde? Las señales de tráfico están diseñadas para mantener el orden y la seguridad en las carreteras, por lo que es crucial respetarlas en todo momento.
La responsabilidad de seguir las normas de tránsito
En muchas ocasiones, los conductores pueden sentirse tentados a ignorar ciertas señales de tráfico debido a la prisa, la comodidad o simplemente la falta de conocimiento. Sin embargo, es fundamental comprender que cada señal tiene un propósito específico y no seguirlas puede resultar en consecuencias graves. Al detenerte ante un alto, ceder el paso en una rotonda o respetar los límites de velocidad, estás contribuyendo a la seguridad vial de todos los usuarios de la carretera.